Juego las lunas de Rona

Hola aventureros!!

Hoy vengo con una entrada muy, muy especial, idea, como no, de nuestra madre lunita La reina lectora.

A Eva se le ha ocurrido una gran idea para promocionar el libro Doce pecados del alma y un minuto de redención, un gran juego por equipos en el que podéis, si os animáis, participar. Yo estaría encantada y me veríais dar saltos de alegría por toda la casa (buenoooo no me veríais pero siempre puedo hacer un directo en instagram XD)

Las Lunas de Rona son concretamente dos libros de la escritora Cristina Pernas que se pueden leer de manera independiente. El juego literario está relacionado con el segundo título de Las Lunas de Rona: Doce Pecados del Alma y un minuto de redención. Cada capítulo de esta obra está relacionado con un pecado de alma y sus personajes se verán inmersos en él de una u otra forma. Nosotros también nos veremos involucrados en el pecado que hemos elegido y a través de él ganaremos más o menos puntos.

En el juego habrá doce representantes, uno por pecado. Estos representantes coordinarán a los participantes de su pecado y optarán al premio final. Pero no os preocupéis, que no solo los representantes tendrán derecho a ganar un premio, entre todos los integrantes de los doce  grupos se sortearán 11 ebooks de Doce Pecados del Alma y un Minuto de Redención.

Funcionamiento:
Para conseguir puntos tendréis que "adquirir" el pase oficial y realizar cuatro actividades (divertidas, fáciles, interactivas) en la que nos ayudaremos todos los miembros del grupo. Estas actividades nos las irán diciendo a medida que consigamos la anterior. Son actividades que se pueden evaluar de manera objetiva, por lo que no hará falta ningún jurado. También podremos ganar puntos extra...

Puntos extra:
Poner el banner en tu blog y enlazarlo aquí
Poner la portada del libro como foto de perfil en alguna red social
Realizar una reseña o valoración del libro
Publicación relacionada con el juego, los libros, o la autora en el blog
Si compráis uno de los dos libros (o los dos) y lo justificáis.


Y ahora tengo que hablaros de mi pecado. La cobardía
¿Cuantas veces, dejamos de hacer cosas por miedo, o más bien por cobardía? seguro que todos lo habéis experimentado, yo sí. 
Debo reconocer que la cobardía es uno de los pecados que más me atrae.
Cuando leo un libro, lo que más me suele llamar la atención de los personajes son lo fuertes y enteros que son, superan el miedo, son valientes.
Me gustaría pensar que en las situaciones más críticas yo también sería así, pero creo que en muchos casos, como a veces me pasa en la vida real, no me atrevería a hacer mucas cosas por miedo, sería cobarde, no me enfrentaría a ese miedo; y no me refiero solamente a salvar el mundo u ofrecerme voluntaria como tributo, sino  a cosas mucho más sencillas como decir lo que sentimos sin miedo al rechazo o salir de nuestra zona de comfort.
Bueno si alguna vez habéis sido un poquillo cobardes, os digo que ahora superéis el miedo y me ayudéis en este juego, prometo que nos lo pasaremos genial. No seáis cobardes, apuntaos!!! (O más bien sed cobardes conmigo!!!

Nos habla de historias de hoy, de personas como cualquiera de nosotros, inmersas en un mundo globalizado, en el que a pesar de estar conectados e informados, nos sentimos pequeños y virtualizados por completo, en muchos aspectos de nuestra vida. Rona vive una existencia gris en la que lo virtual y lo real se confunden, se entremezclan. Su voz, que muestra a través de un blog en Internet, es un eco de la incomunicación y soledad que sacuden nuestra sociedad. Una realidad en delicado equilibrio, que se romperá por un pequeño accidente, un hecho aparentemente insignificante, que cambiará el rumbo de su vida y de la de los que la rodean. Lo inesperado desencadenará historias que se irán tejiendo alrededor de Rona y sus lunas, transformándolo todo para siempre. Porque… ¿qué pasaría si una pequeña mentira se convirtiese en un contenido viral en las redes sociales, llegando a miles de personas en un instante y no hubiese marcha atrás?
Una narración secuenciada como si del ciclo de la Luna se tratase, para los que un día olvidaron vivir la vida.
Y es que nuestras lunas tienen su origen en nosotros mismos, éstas se van formando con pedazos expulsados de las muchas colisiones y pruebas que vamos viviendo. Las lunas de Rona no eran sino restos incandescentes que flotaban a su alrededor y que fueron configurando su amado satélite.
Siempre había oído hablar de los contenidos virales en las redes. Ella se había convertido en un virus que infectaba a usuarios sensibles que propagaban su enfermedad a otras personas, no pudo sino sonreír.
Era como si al alcanzar ese límite, rebotase de repente hacia la más absoluta soledad, donde residía ella.
…su interior era una tormenta que lejos de arreciar, se desbordaba y no fue el amor el que acudió en su ayuda, sino el miedo, un viejo conocido que poco a poco enterraba su corazón. .

En esta era de Internet, pudiera parecer a veces que la única distancia que nos separa de los demás es un “click away”. Sin embargo, ese espejismo se produce porque este entorno consigue alterar nuestro concepto del espacio y del tiempo, deformándolos. Sí, antes nos bastaba con partir de la posición que ocupábamos (dónde) y el tiempo en el que sucedía todo (cuándo). Ahora ya no pues Internet ha roto esa ecuación. ¡Hemos descubierto al fin un transporte para viajar a la velocidad de la luz! Pero, ¡cuidado! Porque este mundo virtual puede traer a nuestra vida no solo situaciones inesperadas, sino también personas que viajen desde el pasado para retorcer nuestro presente.
Así arranca una emocionante segunda parte de “Las lunas de Rona” en la que nos preguntaremos… ¿Cortará finalmente la Moira del destino el hilo de vida de Guillermo? Un oportuno accidente de tráfico lo colocará entre la vida, la muerte y la cárcel. Un suceso que lejos de suponer el final de la trama, abrirá nuevos interrogantes e intrigas. Haciendo realidad esa máxima de que cada final supone un nuevo comienzo. Y así será para Rona, Mario, Fátima, Patria, Mara, Lola, Fernando, Jana o el propio Guillermo, que se debatirán entre luces y sombras. Entre la ira no resuelta, las viejas mentiras que se abren paso hacia la luz, oscuras dudas, dolorosas verdades a medias, la pertinaz ceguera, la seductora tristeza, los celos más irracionales, la enfermiza soberbia, obligadas despedidas y nuevos comienzos.
Cuenta la historia que Psique, la encarnación del alma humana, antes de extinguirse derramó doce lágrimas sobre su amor. Un gesto que apenas duró un instante, pero con el que le concedió una segunda oportunidad. Doce pecados del alma fueron los cometidos y un minuto de redención el que le fue otorgado a “Saol”, que en muchas lenguas se traduce como “vida”. ¿Serán capaces nuestros personajes de aprovechar también este nuevo saldo a su favor, ese tiempo de redención?.